domingo, 23 de junio de 2024

"HISTORIA DE VIDA"-8-Huguito, el amor de mi vida...

Hola!!!

Continúo con mi historia personal. 

A poco tiempo de estar viviendo con mis hermanos en el departamento alquilado, me ocurrió algo maravilloso y místico.

Yo iba caminando por la esquina de Av. San Martín y Av. Juan B. Justo, en Buenos Aires. En esa esquina, había una sucursal del ex Banco Río. Estoy hablando de diciembre de 1992. Hacía casi un año que estaba dolorida, pero era joven y aún tenía energía para continuar llevando una vida normal. Realmente, a la distancia, no sé cómo podía hacerlo. Cualquier otra persona se hubiera derrumbado. Pero, yo no me derrumbaba. Así, que, a quienes quieran darme clases de resiliencia, con mucho respeto, les voy a pedir que se abstengan de hacerlo.

Había un grupo de personas conversando: dos amigos de mi hermano, Claudio y Cristian, y, un desconocido. Este desconocido me dijo algo muy lindo. Sí, un piropo. Algo que ahora horroriza a muchas mujeres actuales, que, evidentemente, no tienen posibilidad de discernir la diferencia entre un halago y una ofensa. Pero yo sí tengo esa capacidad. Y ya la tenía en ese momento. 

Este joven me ofreció lo que tenía en ese momento: unas mayonesitas de promoción de las que regalan en los supermercados. Esta originalidad me resultó sorprendente y al decir: "Gracias", lo miré fijamente a los ojos. E, intuitivamente, supe que se trataba de una persona muy especial. Porque tengo la intuición muy desarrollada; debe haber algún motivo espiritual, pero es así, no estoy siendo pedante.

Caminé media cuadra e ingresé a un restaurante donde trabajaba mi hermano Gustavo: uno de los propietarios era el marido de mi mamá. Mi hermano me preguntó quién me había dado eso. Yo le respondí: "Un muchacho que estaba en la esquina con Claudio y Cristian". Y me fui a mi departamento.

No pensé más en el tema. Seguía buscando solución para mi dolor, que se iba cronificando cada vez más. A los pocos días, estaba almorzando en el restaurante, y, el muchacho se acerca a mí y me saluda. Yo quedé impactada y muy contenta. Mi hermano se sorprendió de que nos conociéramos. Entonces, le explicamos, y, me enteré de que mi hermano también conocía a esta persona.

Y no se trataba de cualquier persona. Se trataba de HUGUITO: un ser humano único y especial; una persona con un nivel de amor y empatía admirables. Alguien incomparable.

Empezamos a salir y nos pusimos de novios. Iré contando, a lo largo de esta historia, el apoyo incondicional que tuve y tengo por parte de Huguito desde ese 5 de diciembre de 1992 hasta hoy, 23 de junio de 2024. Sin él, no estaría escribiendo esto. Sin él, no estaría en este mundo.



Silvita y Huguito por siempre


4 comentarios:

  1. Que linda parte de tu historia de vida!! Huguito es re paráda y lo re banco!! los quiero mucho!

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    1. Hola!!! Vos también sos re paráda y Huguito y yo te re bancamos!!!

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  2. Leer este relato, es como retroceder en un tiempo mágico y de plena frescura natural .

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    1. Wow!!! Sos un verdadero poeta, Anónimo Huguito. Con tu carácter de m... y todo, sos un Ángel en la Tierra. GRACIAS.

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